miércoles, noviembre 28, 2007

439 Partículas de Masa Negativa

Abelardo había tomado la palabra para decir lo que sabía de Perícles bajo la mirada burlona de Mandinga quién evidentemente no simpatizaba con el personaje de la democracia ateniense. Empezó a repetir una frase de un discurso famoso y se fue ralentando sílaba por sílaba hasta gritar: ¡Nos rodean!

Eran ellos, los ángeles, que hacían sentir a la distancia la imagen vanidosa de su flota cósmica simbolizada por siete conglomerados de galaxias rodeando al triángulo central donde se movía el ojo. Tal vez todavía no estuviesen seguros de haberlos identificado…o por ejemplo les querían atrapar con vida… Mandinga hizo brillar sus ojos fosforescentes y extendió cinco dedos en el aire para cada lado como si fueran antenas.

-Están pensando a toda máquina –dijo- todavía están confusos. No esperaban encontrarnos.

Manuel confirmó y enseguida dijo de ponerse en dirección al punto concentrando todas las imágenes mentales en el deseo de permanecer en contacto, pero Abelardo protestó, diciendo que con la tecnología de su nave no le tenía miedo a los siete conglomerados.

-La hemos probado ametrallándola con un rosario mal intencionado que hicimos rezar por un millar de brujos de los mejores.

Mandinga le tapó simbólicamente la cara al tiempo que reboleaba sus negros ojos sobre campo de porcelana blanco azulosa, para decir:

-¡Esperá un poquito. Ellos también hacen inventos! Les he visto disparando con partículas de masa negativa!

Abelardo apenas pestaño.

-Tengo conectado un desviador de esos proyectiles y muchos otros chiches que ellos ni se imaginan. Hasta les puedo invertir el tiempo por el espacio de unos minutos suficientes para que se autodestruyan con sus propias paradojas.

Mandinga festejó diciendo que eso sí que no se lo quería perder y hasta de alguna manera probar ya que tendría que ser muy excitante ver pasar el tiempo para el otro lado y pronunciar las palabras marcha atrás. Ahora fue Abelardo quién le tapó su cara.

-No seas burro, ni por milagro podrías salir de eso vivo!

Manuel objetó:

-A mi me mandaron al pasado y no me hizo ningún daño.

Se sacudió la nave y Abelardo explicó que acababan de desviar un centenar de proyectiles que ahora volvían exactamente hacia sus puntos de origen, pero dejó ese tema para explicar la diferencia de un viaje en el tiempo hecho por desvíos y sin contradecir las vibraciones del entramado cósmico, con unos minutos de tiempo retrógrado que hace coincidir des cuerpos exactamente iguales en un mismo momento y lugar…

-¿Cómo dos cuerpos… es el mismo…

Abelardo sacudió la cabeza negativamente. Hay uno que viene desde el pasado y otro desde el futuro…no pueden ser el mismo, como las mismas personas no lo son. Uno no conoce el futuro y el otro sí. Son dos personas distintas, al menos en eso… Ya te lo he dicho, Mandi, no se puede viajar en el tiempo sin desdoblarse, o mejor… Bueno, sería meterse en temas muy aburridos.

(Esta es una historia continuada. Sería aconsejable leerla desde el post n. 1)

martes, noviembre 27, 2007

438 EL QUE TENGA PERRO QUE LO ATE

Todo eso fue tema de la conversación general que dentro de la espléndida bola plateada de Abelardo se fue desarrollando mientras sobrevolaban el paisaje ondulado que seguía llamándose Uruguay dentro de todos los corazones aunque ya no fuese la república oriental sino la federación de comunas. Tampoco Argentina seguía siendo un bloque único sino cuatro diferentes, todos argentinos y federales. El Brasil no estaba totalmente volcado al anarquismo. Quedaban Estados residuales a la antigua usanza como Piauí y Acre, dominados por una serie de caudillos medievales. Río Grande del Sur ahora se llamaba República Anarquista Farrupinha.

Las comunas estaban funcionando a las mil maravillas, como nunca a algún humano se le hubiese ocurrido tras las experiencia de milenios en los que había que vivir a salto de mata o chupándoles las patas a algún mandón o mandoncito de esos que se cagan todos cuando les toca mirar a la cara al poderoso. Es que en realidad estábamos ya todos convencidos de que la democracia directa era imposible. Que cuando mucho para un pequeño grupito de atenienses que no trabajaban porque tenían esclavos o clientes. Y en otros tiempos cuando la vida era más sencilla y no había necesidad de tener un especialista para cada tema. Claro que la vida entonces era más sencilla porque era como la querían los protagonistas que para mejorarla se reunían con todos sus vecinos. No se aburrían como después cuando les fabricaron millones de televisores que, siempre encendidos no lograron disminuirles el sueño, ni aumentarles la comprensión de nada, sino volverlos zombis. Los tipos se afanaban diciendo discursos a la sombra de aquella enormes columnas de mármol, envueltos en esas sábanas bordeadas de guardas griegas que llevaban hasta una cuarta sobre aquellas sandalias de cuero y tiras y dos por debajo de la mano que saliendo de entre los trapos portaba un rollo de pergamino, tal vez el del discurso, al menos eso era así en aquel friso tallado que aun dormía en lo que había sido el taller del viejo artista.

Y los aplausos venían después de cada discurso que iba a ser recordado y hasta puesto por escrito en un tiempo en que poco se acostumbraba a tomarse esos trabajos, aunque sí a componer poemas con forma de corazón o de arco y flecha y a encontrar la manera de hacer un cuadrado con el material de un redondo. Pasatiempos que encontraban muy inteligentes y merecedores de tanta atención y tiempo de vida como todas las otras artes, incluida la gimnasia y el buen vino.

Ahora pasaba lo mismo. Los discursos no eran muy altisonantes pero cada orador hacía de la síntesis un arte nuevo que se estaba desarrollando mucho entre los jóvenes. Nadie construía oraciones muy correctas pero qué expresivas! Aunque a veces se abusara de la terminología de moda y de algunas morisquetas faciales que ayudaban a comprender el sentido de lo dicho.

Se habían abierto talleres literarios para aprender a decir discursos sintéticos. Había discursos escritos en las columnas de alumbrado. Diez o quince palabras cuya explicación y alcance llevarían veinte hojas. Como el famoso caso de un edicto de una comuna que rezaba:

Artículo primero: El que tenga perro que lo ate.

Artículo segundo: El que no, no.

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viernes, noviembre 23, 2007

437 Papel de Astraza

Y sin embargo ningún acuerdo había sido hecho, más que el implícito en los tantísimos besos y algunas caricias intercambiados sin pagar tasas de aduana ni mostrar cualquier clase de documentos.
Las cámaras mostraron una vez más las columnas humanas despidiéndose con manos abiertas sacudidas en el aire. Todos volvían a sus hogares, reconfortados por la sensación de estar muy lejos del fin de la historia con su innegable posterior aburrimiento. Se habría frente a todas las imaginaciones el largo período futuro de desarrollo y afianzamiento de la anarquía como forma de convivencia humana. Sus magníficos logros y sus limitaciones que se iban a ir conociendo en el desarrollo de los siglos venideros, durante los cuales, mentes brillantes se iban a encargar de ir engendrando y alimentando las nuevas ideas que por fin iban a terminar sustituyendo a las actuales.
Se había hecho medianoche sin que nadie sintiese hambre ni entendiese dónde se había metido el tiempo. Se armaron reuniones frente a las pantallas y se abrieron botellas de vino en el comentario de que una vez más los vecinos habían demostrado ser mejor gente que lo que se dice por ahí. La cuestión de las papeleras estaba resuelta en el espíritu de todos. Ni que decirlo en el de los que habían estado en la última reunión de las comunas implicadas. Ellos sabían que aparte de nacionalizar la planta con costo a pagar en alojamientos turísticos por un monto igual o hasta superior, se iba a probar la producción de pasta para papel de astraza que no necesita blanqueo. El papel de astraza se pensaba usar en la cartapesta que iba a forrar la gran flota de bolas que la Federación de Comunas Anarcas planeaba poner a punto en los próximos seis meses junto con la reducción de las jornadas de trabajo comunal a cinco horas diarias.

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miércoles, noviembre 21, 2007

436 EL BESÓDROMO

Claro que la Red de las Bolas estaba atenta y dirigió instantáneamente sus misteriosas cámaras al saboreado beso que se daban la flaca Magda y el Manuel. ¡Quijosdeputa! Como si aquello fuese una más de las antiguas telenovelas de las 13 y 30 auspiciadas por jabón federal por no decir bao que suena mucho peor. Un beso prolongado que fue después portada por muchos días cuando se reanudaba la programación con el discurso de Abelardo sobre los límites del desarrollo económico de fondo. (Me reservo la fuente) Una dupla perfecta. Los labios puestos uno sobre otro girados 90 grados. Me pareció.

Poco menos vehemente fue el que a continuación se dieron Vittorio Giorgionne con Margarita y también Mandinga con una entrerriana grandota que venía desde Colón. Y otros besos que otras muchas parejas recientes o añejas, se daban a un tiempo transformando al puente en un besódromo desde el cual se extraían instantáneas que rebotaban en todas loas pantallas de América quemando la imaginación de millones de televidentes.

Un panorama sobre el puente. Que se extendía por la leve joroba de hormigón rebasando la frontera y llevando los chasquidos de los besos, de cuando en cuando, según la brisa, a inundar las pasturas argentinas con ondas de amor y paz, aunque sin milagros. Después se vio la luna llena a deshora iluminando el río en esa noche inesperada que se había cerrado sobre las aguas donde bailaban sus reflejos. Algún ganso puso música de ukeleles para acompañar la toma pero enseguida fue cambiada por una milonga que quedaba bien porque era lo que parecían expresar los cuerpos retorcidos de las dos mil quinientas parejas que se seguían besando y… ah! Parece que ahora toca cambio de parejas como en el baile del ladrillo!

Así es señores televidentes. Como ustedes pueden estar viendo, sobre el puente internacional se a generalizado el beserío que ya no respeta ni sexo ni edad ni da muestra de cesar más que para tomar aire. ¿Se podría deducir de lo anterior que se han terminado de limar las asperezas y llegado a un acuerdo definitivo? Por el momento así parece ser…

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martes, noviembre 20, 2007

435 FRENAR EL DESARROLLO ECONÓMICO

En fin que sin querer se habían reunido como quince comunas, entre argentinas y uruguayas, sin contar las que estaban incompletas. Se fueron reagrupando a los gritos y con agitación de manos. Se intercambiaron miradas de acordar un diálogo entre los de cada comuna con los otros de las otras. Lo acordaron y tras un sostenido silencio un “cabecita negra” fue el primero en hablar para pedir a los hermanos uruguayos que por favor explicaran qué pensaban hacer con esa chimenea que había provocado tanta desunión.

Después un fraybentino se puso a contar parte de los debates en los que había participado. La cuestión empezaba en:

1-para qué las pasteras.

Seguía en:

2-para quién tanto papel.

Y terminaba en:

3-una pregunta: ¿Estamos dispuestos a vivir con mucha menos comodidades y novedades tecnológicas para lograr un nuevo equilibrio con la naturaleza, aun a costa de tener que desechar integralmente nuestro moderno modo de vida?

Un cordobés –que andaba de paso- pidió explicaciones sobre que cosa era esa de desechar integralmente nuestro moderno modo de vida.

Abelardo, aun con no ser habitante, se lanzó al ruedo ofreciendo explicarlo él.

Le aceptaron y dijo que el desarrollo económico acelerado que es esencial al capitalismo está completamente reñido con las ya exiguas posibilidades autocurativas del planeta. La cuestión podría ser resuelta si la gran patria anarquista se seguía extendiendo a todo el planeta y si además todos admitían que a mediano plazo el desarrollo económico debía ser frenado y sustituido por el desarrollo humano. Pronosticó además que las transformaciones se iban a producir en cadena a partir del primer cambio que se hiciera, porque un cambio iba a implicar varios más para reacomodar toda la actividad y como la atención iba a estar puesta en no cambiar una cosa mala por otra peor, la sucesión de cambios podría multiplicarse hasta que llegáramos otra vez a la sociedad del neolítico pero con una enorme población.

Un profesor de Gualeguaychú contó que eso le habían querido explicar a unos políticos del pasado, sin ningún éxito, aunque les mostraron en funcionamiento el sistema de ecuaciones de Río Lobos que marca un punto de ruptura del equilibrio –ya ampliamente superado- después del cual el planeta no puede recuperarlo por sí mismo.

-El capitalismo ha gastado todas sus “vidas” en este juego aún antes de lograr que todos los humanos tengan comida. El socialismo se ha debatido entre ser el competidor o el socio del capitalismo. Pero nadie más que nosotros ha postulado la marcha hacia una sociedad sin economía en el sentido del aumento de la producción y de las ganancias. No queremos más que el progreso humano.

Mientras tanto Manuel se había vuelto a distraer de los discursos por besar los labios de Magda que extrañamente le parecían cada vez más atractivos con el paso del tiempo. Porque estaban allí, le parecía, como un puerto hacia el que ansiaba navegar para sentirse pleno. Como una naranja jugosa en un día muy soleado o un baño de agua fresca.

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domingo, noviembre 18, 2007

434 LOS HERMANOS SEAN UNIDOS

De pronto un criollo entrerriano
hizo señas de parar.
Dos cosas quería aclarar,
como lo hace el payador,
que habla sin ser dotor
pero cree en lo que dice.

Una cosa es la bandera,
Ese trapo tan bonito
Que ofender no me permito
Aunque haga alguna broma
Sus colores son aromas
Que se huelen dende lejos.

Otra cosa es la gente
que bajo bandera habita.
Que sufre ama y que grita,
sin mentir un sentimiento,
flameando en el mismo viento
que a los vecinos agita.

La gente es toda una,
a los dos lados del río.
Unida por amoríos
que las barrancas no atajan,
se mezcla como baraja
pa defenderse del frío.

Los hermanos sean unidos,
porque esa es la ley primera;
tengan unión verdadera
en cualquier tiempo que sea.
Porque si entre ellos pelean
los devoran los de ajuera.


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viernes, noviembre 16, 2007

433 LA BATALLA DEL MATE

Cliquear sobre el siniestro ícono, invitar a la flaca y al abuelo para darse un paseo y salir marchando para las bolas, fue todo uno. Claro que Abelardo insistió en ir en su súper sport y atrás se sumaron los otros. Nadie se quería perder una ocasión tan histórica que desde ya estaban llamando “La Batalla del Mate Amargo”. No porque pensaran que se iban a terminar tirando con la cucurbitácea por las cabeza, sino porque el elemento tradicional estaba siendo el mediador perfecto para un entredicho entre vecinos que no iban a cometer la estupidez de andarse agrediendo. En la historia podría haber algunas cuentas mal saldadas, pero nunca entre dos pueblos que siempre se han entendido sin necesidad de majestades imperiales que vengan a molestarse porque alguien simplemente dice la verdad.

Salieron en ángulo de 45 con dirección noroeste y en un periquete plateado de tiempo estaban llegando sobre la vertical de la banda de hormigón que une las dos orillas nunca separadas. Unidas han estado, por toda la gente que a diario las ha zurcido con palabras comunes y afectos y negocios. Amoríos y aventuras y revoluciones…

Bajaron entonces en la vertical justo sobre las cabezas de la multitud que al darse cuenta de que sobre ella descendía una bola luminosa sintió una cierta aprensión que bastó para que parara de corear aquella consigna de “era la papelera, era, era”. Se asomó a la ventana de la cabina quien había venido al frente, el Chabón Suárez, a decirles que no se preocuparan por la bola. Que en ella venía Manuel, el que el año pasado había cruzado con ellos el puente por primera vez en patas y que ahora era el líder indiscutido de la revolución anarquista de América.

La respuesta fue atronadora:

-“Manuel, Manuel, ¡qué grande sos!”

Sobre la banda del puente se vieron levantar 4998 brazos al cielo que de inmediato comenzaron a formar oleaje mientras muchas patas retrocedían para dejar un claro donde pudiera aterrizar la bola.

Cuando se abrieron las puertas-rampas de la nave de Abelardo y por ellas descendieron todos los pasajeros comenzó el carnaval. Porque también venían músicos entre la muchedumbre, que sacaron de inmediato sus instrumentos como si aquello fuese una película musical insoportable donde tocan sin saber sostener la guitarra ni mover las manos al ritmo de la música. Lo primero que sonó fue un chamamé muy apurado por hacer pausas donde se debían gritar los zapucayses, que se gritaron tanto y tanto que fueron sentidos desde Fray Bentos donde la gente salió a las calles para ver qué era lo que pasaba.

-Que es del lado del puente, te digo!

Enseguida se formó una caravana formada por toda clase de vehículos y de gente. Ya iban sabiendo lo que ocurría porque muchos habían estado mirando la TV hasta antes de salir a contarle a los vecinos e invitarles a pintar las pancartas que también decían:

“Manuel, Manuel, qué grande sos!”

Cuando la nueva columna llegó a la cabecera uruguaya muchos temieron que el puente no soportara tanto peso. Exactamente cinco mil personas que bailaban aquello que sentían salir de sus corazones, mezcla de cumbia con chamamé, candombe y zamba. Carnavalito, chacarera y Bamba.

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jueves, noviembre 15, 2007

432 Cliqueá el Icono Izquierdo

El Compañero del piquete de guardia se tomó la pera en evidente postura meditativa. En casos donde está en juego una hermandad que arranca en los albores de la historia es preciso mecerse la pera, rascarse el cuero cabelludo y retener las primeras palabras que vienen saliendo por los canales aferentes. No decir de golpe cosas como hermano no me jodas, vengan a tomarse unos amargos aquí con nosotros y déjense de joder, o cosas por el estilo, por sólo mencionar las más suaves y no mandarlos a analizar toda la basura que tiran a diario sobre el Río de la Plata. Que mugrientos, en alguna medida, somos todos y todos vamos a tener que cambiar si queremos salvar el planeta y dejarles algo a nuestros hijos y nietos…

-Te bañarías vos en El Riachuelo…?

-Y eso qué tiene que ver? El Riachuelo es nuestro.

-Sí, pero tira toda la mugre en el Río de la Plata, hermano…

El entrerriano miró muy serio al fraybentino.

-Bueno, mirá, nosotros somos como dos mil quinientos y vamos a pasar. ¿Se van a salir del camino…?

El uruguayo dio un último chupón a la bombilla y levantó la mirada serena hacia su nervioso vecino.

-Sobre eso no hay duda. Pero permitime una última pregunta. ¿Te acordás de Manuel, aquel que el año pasado cruzó el puente descalzo y en calzoncillos?

-Claro… Claro que me acuerdo y qué…? Yo fui uno de los que lo acompañó y los milicos de este lado nos metieron preso.

-¿Y te trataron mal?

-No es que me hayan tratado mal… el guardia de mi celda me cebó mate tres días seguidos y después nos largaron porque todos ustedes en el fondo saben que tenemos razón.

-Y claro que tienen razón… Ja, yo fui uno de los que les arrestó, me acuerdo… vos fuiste el que cuando Manuel quiso explicar qué venían a hacer, se puso a canturrear “Somos los Saliery de Charly”, ja ja.

-Bueno, apártense!

-Eh, esperá un poquito, esos no son modales para usar entre vecinos… ¿Y si te dijera que yo soy amigo de Manuel y que si querés le puedo pedir que venga a conversar un rato?

-¡Que vas a ser…! Pss…

Una voz interna de esas que suenan por dentro de un caño hueco avisó que Manuel estaba en ese momento mirando una pantalla conectada a la red de Las Bolas de Manuel y podía comunicarse activando el ícono izquierdo cuyo cartel reza “ida y vuelta”. El Entrerriano levantó la mirada al pequeño parlante colgado con un trozo de alambre herrumbrado de un clavo en peores condiciones en la pared del puesto de frontera.

-Y la imagen? –preguntó.

-Adentro. Vení, pasá, pasá. Tenemos un 29 pulgadas.

Antes de entrar giró la cabeza y anunció a los que le seguían:

-Esperen, tenemos una tele conferencia.

Manuel tomó el ratón y desplazó el puntero hacia el ícono mencionado.

-

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miércoles, noviembre 14, 2007

431 LA CORONA SE MOLESTA

Pero la imagen fue cortada por un flash informativo muy sacado de contexto. Los presidentes americanos andaban por Chile y se había producido un entredicho entre los españoles y el inefable compañero presidente Chávez, para coronar el anterior entre Tabaré y Kirchner que seguían ostentando sus respetivos cargos porque nadie se acordó de decirles que se habían quedado sin quórum. Caso distinto al de Venezuela, gobernado por su presidente electo y todavía con una organización política tradicional. O el de España, con presidente y además corona, la que no tuvo otro remedio que agraviarse

A continuación pusieron la imagen de la papelera vista desde arriba del puente. Manuel se sorprendió al reencontrarse con esa imagen que tenía guardada en la memoria de cuando pisoteaba, junto con los otros ocho, ese duro hormigón.

-¿Así que la comuna de Fray Bentos siguió no más con el proyecto?

Mandinga se rió.

-¿Saben lo que me dijeron…? Que las discusiones se siguen nada más que para ver quién termina teniendo razón. Que de todos modos ya se llegó a un acuerdo de transformarla en otra cosa que va a dar lugar al trabajo de toda esa comuna. Tabaré y Kirchner todavía no lo saben.

Manuel estaba en otra cosa volviendo a los recuerdos de aquella aventura. Ahora se daba cuenta de cuan cómico había sido todo. En aquel momento no lo había visto por andar demasiado preocupado con lo que le pasaba. Si hubiese sabido que el mismísimo Germán Oesterheld le había preparado toda esa historia plagada de sorpresas y metidas de pata…bueno, seguro que hubiese al fin estallado en una gran carcajada para festejarle el chiste de equivocarse a cada rato y tenerle siempre al borde del precipicio… Pero claro, los tipos todavía no sabían como manejar las bolas por control remoto y solían equivocarse por unos cuantos metros o quilómetros… En un año se había producido un avance muy grande en el diseño de las bolas que sin llegar a la sofisticación que mostraban las grandes naves de pasajeros de Nuestra Compañía, hoy por hoy esa bola que había traído Abelardo, bien se la podría comparar con un Porsche pistoneando.

Otro llamado de atención desde la pantalla. ¡Los argentinos se había lanzado a cruzar el puente! El cronista de voz un tanto gomosa se atragantó pronunciando las palabras acompañadas por tomas hechas con teleobjetivo. ¡Eran una multitud caminando todos descalzos para simbolizar la vuelta al respeto por la naturaleza! Una mancha gris compacta que avanzaba sin pensar en detenerse en ninguna frontera. Del otro lado, o de este si se quiere, los muchachos de la comuna militar del puente que fueron tomados por la cadena de Manuel, tomaban mate sentados en unos banquitos de ceibo mientras la mancha avanzaba. La veían sí y hasta repetían junto con la radio que algo se movía hacia ellos desde el lado argentino. Enseguida llegaron y pasados los saludos de rigor, hubo que preguntarles que era que venían a hacer todos juntos para este lado.

-A volar la papelera! –respondió un coro de mil voces.

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martes, noviembre 13, 2007

430 MI LOCO VIEJO AMIGO

Mandinga rió con su risa aguda. Aquella risa que le salía no de entre sus gruesos labios sino desde algún lugar de la garganta pasando por detrás y saliendo por los oídos. Por un decir que intente explicar la extraña forma de resonar aquellas risillas burlonas que solía emitir cuando la comicidad de la situación, a su manera de sentir, llegaba al extremo.

-Abelardo, Abelardo… viejo loco, mi amigo. ¿Qué pretendés? Los muchachos están haciendo las cosas mucho mejor que lo que vos nunca soñaste… ¿A qué venís a calentarles la cabeza?

-Precisamente por eso… No quisiera que toda esta revolución tan soñada por generaciones y generaciones, se termine estropeando por la indolencia de creer que ya está todo hecho. Habrá guerra. Tenemos enfrente a un enemigo que nunca ha dudado de usar el arma que fuere. No esperen caballerosidad ni buenos modales. No crean en tratados ni armisticios, esperen la traición… Tienen un solo camino posible, la victoria total, con aniquilamiento de las armas enemigas.

Manuel preguntó si pretendía que fueran ellos los atacantes.

-Por supuesto! Cuanto antes mejor y no con esos proyectiles propios del cine mudo. Con el mismo procedimiento que han lanzado tortas de merengue pueden lanzar… -Miró a Manuel- vos ya lo hiciste contra la nave de San Jorge que implicó un repliegue inmediato.

-Eso fue un duelo.

-Que los apartó de la antigua costumbre de meterse dentro del punto… Yo estaba mirando la escena por el visor de la cuerdas multidimencionales. La verdad es que temblaba de miedo, tuvimos suerte porque el finado San Jorge… fue él quien entonces subestimó al rival. Creyó que reteniéndoles fuera del punto ya eran pan comido…

-Pero entonces ¿Querés que ataquemos o que nos metamos en el punto?

-¡Las dos cosas! ¡Guerra de guerrillas! Ellos no pueden hacer lo mismo, no saben ni quieren aprender a meterse dentro de un punto. Y al mismo tiempo ustedes no pueden vivir escondidos…

Al mismo tiempo todos giraron la cabeza hacia la pantalla grande del monitor, donde se repetía la misma escena que estaban viviendo aunque con unos segundos de diferencia, suficientes para producir el efecto de eco en los sonidos.

-¡Estamos en directo! –gritó el Cholo.

-Busquemos las cámaras –el Chumbo.

Ernesto aconsejó que alguien se fijara si al moverse ellos la imagen iba aumentando de tamaño, justo en el momento en que la pantalla mostró un cambio de toma, ahora desde sobre sus cabezas. Todos miraron sin ver otra cosa que la bóveda de arenisca rosada del techo. Allí no había ninguna cámara… al menos de tamaño visible. Alguien corrió en busca de una escalera y cuando volvía se enteró de que la toma ahora era desde abajo para arriba, exactamente desde un punto ubicado entre el pie derecho de Manuel y el izquierdo de Cholo sin que hubiese manera de taparla poniéndole un pie encima. La imagen igual era obtenida a través de cualquier objeto que pretendiera obstaculizarla…

-No busquen más –aconsejó Abelardo- no se trata de ninguna cámara. -Esto es una visión como la que Germán obtiene con el visor de cuerdas. Se toma desde cualquier lugar del universo. Solo hay que ajustar las coordenadas al punto que se quiere enfocar.

Ahora la imagen apareció normal –toma horizontal a la altura de las mandíbulas- y todos parecieron acercarse, un poco confusos, al entorno de Abelardo. Querían entender de una buena vez como mierda era que se podía espiar cualquier lugar sin necesidad de ningún aparato.

Abelardo se rascó la cabeza y nerviosamente miró como pidiendo ayuda a Mandinga.

-¿Querés que yo se los explique?

-No, Mandi. Ya estamos otra vez metiéndonos a cambiar la historia!

Mandinga volvió a reír divertido.

-Desde hace rato…

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lunes, noviembre 12, 2007

429 LA ESTUPIDEZ DEL SISTEMA

Cholo entró en el terreno.

-Nuestra fortaleza no radica solamente en las bolas, sino en que es la gente la que ha llevado adelante esta revolución. ¿Cómo podrían vencernos…? Lo más que podrían hacer es derramar sangre estúpidamente, como cuando Viet Nam.

Y Manuel:

-Si es que les presentáramos batalla… Los podríamos ignorar. Dejarlos formar esos gobiernos títeres que acostumbran y no darles bola…Seguir con el funcionamiento de las comunas… no pagar los impuestos… no mirar televisión.

-Desatarían la represión. Encarcelarían a los dirigentes. Harían correr rumores de que algunos de ustedes ha traicionado a los otros…Tienen mil armas de ese tipo y una larguísima experiencia. El que no se afloja con las ofertas de dinero y poder se afloja con la picana eléctrica en los huevos o por la tortura sicológica. Lo habrán leído en Fahrenheit, no participar de la estupidez del sistema pasaría a ser grave delito.

-No creo que haya arma tan poderosa como el boicot total.

-Nunca se ha logrado. Por algún lado siempre revienta la cadena y un boicot a medias solo sirve para saber cuales son los eslabones débiles, los que prefieren la comodidad del alcahuete a los nervios del protagonista.

Cholo fue categórico:

-La experiencia que estamos haciendo no tiene ningún antecedente. Aquí no hay dirigentes que meter preso ni corromper. No se puede corromper a todo el mundo!

-¿Te parece…? –dijo Abelardo con evidente intención recursiva y continuó. -¿Qué será lo que han estado haciendo todos estos siglos? Con la enseñanza, con la policía, con la publicidad… La enseñanza al servicio de la obediencia y la genuflexión creo que ha sido lo principal. Han estado encontrando medios para frenar, cada vez más indirectamente, el avance de las masas. Seducirlas con migajas, entretenerlas con mucho circo y espejitos de colores, convencerlas de que la felicidad es tener lo que le dejan tener al que se porta bien y colabora.

-Pero eso se terminó –protestó Cholo. –Aquí en Uruguay la publicidad y los operativos de formación de opinión publica en contra de las comunas, se fueron muriendo solos por falta de clientela. La enseñanza se hace en cada comuna a partir de las explicaciones de que cada humano tiene una dosis propia de poder que es intransferible, que nadie ha inventado algo tan maravilloso como la dignidad humana, que los dioses son proyecciones de lo que el hombre siente adentro y que la libertad no es un derecho, es una obligación. Nadie puede huir de sí mismo …o por lo menos no debería…

Abelardo casi se puso a aplaudir pero se dio cuenta a tiempo de que todos le iban a criticar su antipática ironía. El muchacho era inteligente y joven. Admirable su convicción tratándose de defender una postura tan heterodoxa, pero…

-No sobrevaloren los éxitos actuales. Unos meses no son nada frente a la historia. Hay una muy basta experiencia de fracasos a partir del éxito…

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sábado, noviembre 10, 2007

428 UN SER IMPERFECTO

Aníbal quería saber quién era ese viejo de pelo blanco que hablaba como un filósofo chino y se lo quiso preguntar en voz baja al de al lado cuando bruscamente todos callaron dejándole con el volumen alto para que se oyera la pregunta y Abelardo levantara la mirada como un par de sables de plata que clavaban sus puntas a ambos lados de la cabeza del preguntador.

-Yo soy Abelardo Goiticoechea, un ser imperfecto que cuando niño en la tierra se llenó el cerebro de historietas, el corazón de heroicas emociones y el alma de la poesía del universo.

-Igual no entiendo por qué llora.

-Porque tarde uno comprender las cosas.

-¿Las historietas?

-No. Lo que es una persona y un personaje

-¿Cuál es la diferencia?

-El sargento Kirk, por ejemplo es un personaje…

-Que tiene su alma…

-Alma de personaje pero no alma de persona.

-¿Y cual es la diferencia?

-Ellos siempre van a ser los mismos. Nosotros cambiamos. Cuando tratamos de dominar a una persona la transformamos en un personaje al que le definimos todas las maneras de reaccionar, los gustos y los intereses. El que es personaje acepta el modelo que le presentan. Las personas ni siquiera se plantean la posibilidad.

Manuel se adelantó.

-¿Y yo qué tal?

-Sos persona Manuel, por supuesto, pero nosotros no tendríamos que haberte siquiera tentado. Quisimos hacerte personaje, transformarte en el nuevo Che Guevara que volando sobre una escuadra de naves luminosas liberara al menos América Latina de la dominación por el dinero y el poder.

-Tendría que no haberles dado bola en nada…

-Muy difícil, te apabullamos a tecnología.

-Y además dejaron la puerta abierta para que entraran los ángeles y me vinieran a raptar!

-Fue un error estúpido, lo reconozco.

-¿Y ahora qué hacemos?

-La brecha está cerrada. Puede venir de tanto en tanto algún ángel pero no creo que se ocupen de hacer operaciones ellos. Vienen por tareas administrativas de control de lo que hacen los de arriba que son los que están a cargo del dominio del planeta. O sea que… Si hay enfrentamientos ustedes tendrían las de ganar por la diferencia de la tecnología en materia de naves. Los ángeles siempre se han negado a transferirles esa clase de conocimientos.

Cholo ahora se rió casi con entusiasmo.

-Así que otra vez será solamente entre nosotros y ellos?

-Por eso te decía al principio que tenían buenas posibilidades de éxito pero pasando por el peligro de tentarse con el poder… Tendrían que tomar conciencia de que en caso de ganar la guerra sería tal el poder que se centraría en ustedes, que podría llegar a serles imposible no abusar.

-Ganaríamos todos la guerra, no nosotros.

-Pero en las mentes de millones de latinoamericanos serían ustedes. Ahí está el poder.

-Las comunas se manejan todas con independencia…

-Pero pensando en ustedes….

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jueves, noviembre 08, 2007

427 Tengo Algo Que Decirles

Fue entonces que Abelardo apareció caminando lentamente, cabizbajo y meditabundo, hasta reencontrarse con el grupo que le había olvidado en el lugar de la reunión anterior. Algo en él hizo que todos se callaran. Parecía venir soportando una pesada carga que seguramente ansiaba alivianar.

-Algo tengo que decirles al respecto…

Fue a sentarse a un costado sobre una saliente de la arenisca de la pared. Desde allí levantó apenas una mirada opaca que abarcaba a todo el grupo.

-Yo he sido culpable de muchas cosas… Reconozco que me he metido, por insano interés, en cuestiones en las que nunca debí meterme. Alteré el libre y natural curso de los acontecimientos… por amor… por vanidad intelectual… por estupidez. Después…Lo induje a mi amigo Germán a que probara a su vez de proyectar sus técnicas literarias a las cuerdas dimensionales del universo que habíamos descubierto. Reaccioné cuando ya era tarde y se había abierto una brecha por donde era fácil pasar de nuestro mundo al de los vivos cosa que podrían aprovechar otras gentes tal vez con no tan buenas intenciones… Pero para reaccionar debía contrarrestar los cambios ya en curso de acción o al menos compensar los males que esos cambios provocaran en personas inocentes… Para eso… era necesario determinar exactamente cómo hubiesen sido las cosas si no hubiera ocurrido la pequeña corrección de coordenadas en el sistema multidimensional…¡Pero eso nos resultó siempre un problema imposible de resolver!

Abelardo lloraba. El segundo en poco tiempo que la emoción le ha desbordado dentro de la caverna.

Manuel fue hasta él y dejándole unos instantes de desahogo, después le preguntó:

-¿Querés decir que no saben cuanto cambiaron la historia?

Abelardo apenas levantó la cabeza.

-El futuro…

-¿Qué tal vez no cambiaron un carajo?

Ahora se enderezó.

-No. Yo creo que algo sí cambiamos. Pero no sabemos cuanto.

-Y decime, abuelo… Esas técnicas literarias aplicadas a las cuerdas ¿cómo eran?

Abelardo giró la cabeza y habló con energía.

-No. Ni por un instante pienses lo que estás pensando! Nosotros alterábamos algunos detalles en las probabilidades de que ocurra algún acontecimiento fortuito en un determinado momento y lugar. Con eso pretendíamos aumentar la tendencia históricas a concretarse en realidades más a nuestro gusto y convencimiento… Pero lo del blog ese que sale en internet, nosotros no hemos tenido nada que ver. Hasta creíamos que era otra de las actividades del grupo de ustedes, Los Maquis.

Manuel se cuadró serio frente al viejo.

-Y ahora quieren que esto sea siempre una historia heroica?...Para eso aparecieron los ángeles, no?

-No, Manuelito… No es así… Nuestra culpa fue facilitar la pasada por esa brecha que te decía, pero… Nosotros no queremos que vivan de guerra…queríamos otra cosa…

-¿Qué querían?

Abelardo dejó brillar sus iris almendrados en el aire de la cueva al sonreír culposamente.

-Una revolución libertaria en la tierra y… yo, además quería tu felicidad Manuel.

-La revolución está en marcha…

-¿Y tu felicidad?

Manuel no pudo disimular un gesto de impaciencia.

-Mirá…soy bastante feliz pero… si no se hubiesen metido a jodernos la vida tal vez sería mucho más.

El abuelo, aunque avergonzado le sostuvo la mirada.

-Creeme, Manuel, hace tiempo que nos prometimos no cambiar más nada. …Ni siquiera para tratar de retroceder los acontecimientos a los derroteros originales.

-¿Y la brecha?

-Está cerrada.

(Esta es una historia continuada. Sería aconsejable leerla desde el post n. 1)

miércoles, noviembre 07, 2007

426 ¿No será esto una fantasía?

Olvidaron los cadáveres y fueron todos a rodear a Cholo para lograr que poco a poco se incorporara perdonándose, aunque fuera en parte, el acto aborrecible de matar para vivir. Lo fue logrando y poco a poco pudo levantar la mirada para ver a sus amigos.

-Tendríamos que encontrar la manera de evitar eso.

-No se puede –le dijo sorpresivamente Manuel, poniéndole una mano sobre el hombro- La vida y la muerte se mezclan en la que nos tocó vivir. Esto estaba escrito.

Cholo se despabiló.

-¿Qué estás diciendo?

-Que estábamos tratando de evitar el derramamiento de sangre y ocurre justo esto. No es casualidad.

-La posibilidad existía…

-Pero vos no notás que hay como una tendencia a que entremos en una historieta heroica donde pelean dos bandos, uno bueno y otro malo.

-Nosotros somos los buenos, supongo.

-Sí, pero no importa--- ¿Sabés qué? Nos necesitan…

-¿Quién nos necesita? ¿Y para qué?

-Somos los personajes…

-Ah, eso otra vez…! …¿Quiénes?

-Yo qué se quien puta escribe esta historia… quién sea, nos necesita porque sin personajes no hay historia

El Cholo recuperó el humor. Se reía.

-Nos podríamos declarar en huelga. No hacer nada, no hablar.

-Ja, yo creo que si lo hacemos, los tipos adaptarían la historia a eso y nos meterían en nuevos problemas para obligarnos a actuar.

-Pero te los supones omnipotentes?

-Yo qué se! Un escritor puede inventar las situaciones que van a rodear a sus personajes.

-Pero esas situaciones son imaginarias. Solo ocurren dentro de la fantasía…

-¿Y esto que vemos…no será una fantasía?

Cholo se impacientó.

-No esta pared es de piedra y si le pego me lastimo. Los muertos que están allí, están allí y están muertos.

Manuel sonrió compasivo.

-No me hagas caso…

El silencio no duró dos segundos hasta que la carcajada de Mandinga empezó a crecer y rebotar en todos los recovecos de la caverna. Se golpeaba la cabeza y la cara con las manoplas como un perfecto simio sacudido de risa tartamuda.

-¡Es un genio! No me digan que no es un genio. ¡Fíjense en la forma que lo dijo! Pensar que algunos escriben libros que nadie entiende…

(Esta es una historia continuada. Sería aconsejable leerla desde el post n. 1)

sábado, noviembre 03, 2007

425 El Llanto de Cholo

Manuel sabía que no lo iban a matar. No iban a hacer algo tan antinatural aunque fuera costumbre en esos casos en que nadie piensa que el acusado se pueda recuperar. Ejecutarlo así sería como pretender tener la razón de una manera absoluta, sin ninguna clase de matices… Ahora… Dejarlo suelto era demasiado peligroso…

Cholo sabía que no lo iban a matar. No iban a hacer algo tan reñido con todos los principios humanistas como matar a un sujeto indefenso por muy asqueroso que pareciera…Ahora…¿Dejarlo libre…?

Ernesto Federico sabía que no lo iban a matar. No era esa la vibración que estaba emitiendo el grupo ni el ánimo que anidaba en su corazón…Ahora bien… ¿Qué hacían?

Dengue sabía que no lo iban a matar. Miró la cara del hijodeputa y encontró aquí y allá, en esa anatomía, pequeños indicios coincidentes con cosas que él había visto en las máscaras de sus pesadillas. Ahora, pensó, nosotros estaremos siendo esas máscaras para él…Habría de ser muy fuerte el miedo que tenía y por lo tanto mucho el ingenio que estaría consultando para zafar otra vez y seguir masacrando gente. No lo podían largar, pero tampoco ensuciarse las manos con sangre.

Chumbo se imaginaba que sus amigos no se iban a animar a matarlo. Era natural, todos ellos siempre habían elegido el método blando y mental para las rebeldías. Tal vez tenían razón, él lo podía aceptar y convivir con esta gente tan poco preocupada de demostrar quién es más macho como le había tocado a él aprender a la fuerza, desde que tenía memoria. Aunque pareciera que estaban jugando un juego de niños… Convivir con gente de la que no hay por qué cuidarse tenía también su encanto.

Vittorio Giorgionne sabía que no era posible ejecutarlo, cosa que de alguna manera se merecía, sin quebrantar todas las imágenes internas, identificatorias del grupo. Sería una herida imposible de cicatrizar y por eso capaz de terminar con el grupo mismo. Ahora iban a tener que exprimirse el cerebro para sacarle la solución al dilema…porque la tercera posición, la condena de cárcel, tampoco parecía viable.

Magdalena sabía y quería que no lo mataran. No quería llegar a ver a los suyos como seres sanguinarios. Ahora… Las alternativas parecían pocas y nada bonitas.

Margarita sabía que los hombres se iban a romper la cabeza pensando los argumentos a, b y c para contrastarlos con los d, e y f y sacar las probables conclusiones 1, 2 y 3 que serían las que ella había pensado desde el principio sin ningún argumento.

Nilo sabía que estaba de visita pero pensaba intervenir en la discusión porque los crímenes de Dow eran contra la humanidad.

Mandinga pudo leer algunos de esos pensamientos con resignación. Sabía de antemano que no lo iban a condenar a muerte, única cosa que podría detener a aquella máquina sin alma y mandársela a sus parientes allá en el segundo tiempo. Que se le iba a hacer, sus amigos eran humanos, la especie más contradictoria que nunca se haya visto. La especie que tanto masacra millones en frigoríficos humano, como llora enternecida por una escena sentimental.

-¿Me permiten proponer una solución transitoria?

Las miradas que se intercambiaron fueron permisivas. Cholo, sin bajar el arma que colgaba de su cuello y de perfil le contestó

-¿Por qué transitoria…?

Mandinga encogió los hombros –con lo que parecía más alto y feo- y abriendo las palmas inocentes a los lados –como si esperara ver si llovía- dijo:

-Porque no creo que lo puedan resolver ahora sin consultar a todos los pueblos que han sido víctimas de ese sujeto…

Aníbal gritó “Guarda que atacan” y cuando miraron restallaban las armar de Cholo y Chumbo, que casi habían caído en distracción al momento en que los clones arremetían por tres puntos al mismo tiempo con pretensiones de que los laterales llegaran a quitarles las armas. Quedaron tres hileras de cadáveres en un charco de sangre gris y el lamento desesperado de Cholo que lloraba hecho un ovillo sobre el suelo.




(Esta es una historia continuada. Sería aconsejable leerla desde el post n. 1)

viernes, noviembre 02, 2007

424 JUZGARÁN A DOW

A esa altura el Chumbo, que se definió como un hombre de acción, quiso salir en busca de Cholo, por considerar que no podía estar ajeno a esa discusión, pero no pudo. No pudo irlo a buscar porque todos salieron tras él a discutir en el recodo de la caverna donde mantenían a los prisioneros.

-¿Prisioneros…?

Recién se dieron cuenta entonces que la palabra en boca de ellos sonara tan extraña. Claro que sí. Era el punto prioritario del momento decidir qué hacer con Dow, hierro candente que no terminaban de soltar ni de agarrar.

Fue justamente Chumbo quien lo nombró con ese nombre que resonó bajo la bóveda de tal modo que cuando doblaron hacia el recodo ya los prisioneros y Cholo estaban enterados de que venían y de qué venían hablando.

-Si esto hay que terminar de resolverlo –les dijo Cholo, desde su extravagante figura de negro laburante intelectual con una tartamuda en la mano. –Ya estoy podrido de vigilarlos.

Inmediatamente Gris Dow levantó un brazo desde allá en el fondo para insistir con su razón de tener derecho a defensa en cualquier juicio al que se le quisiera llevar.

Margarita advirtió en viva voz:

-Cuidado con ese que es traidor. Puede tener todavía algún arma entre la ropa.

Lo dejaron venir. Ernesto lo palpó de armas.

-¿De qué se me acusa? Tengo derecho a saberlo para ejercer mi propia defensa.

Todos se miraron mientras Nilo hacía ese gesto de juntar todos los dedos de una mano en un lugar más o menos visible y bajarlos de golpe mientras lo labios hacen unos movimientos que bien podrían corresponder con la expresión “¿Y este quien mierda es?”

Algo le explicaron en cuchicheos, pero no mucho. Se trataba de decidir si le daban algún castigo o lo dejaban suelto a este asesino despiadado que fumigaba seres vivos.

Nilo se adelantó a decirle:

-Te acusan de ser asesino de multitudes y yo voto a que te manden junto al amor de tu vida, la muerte.

-Como presentación al acusado vale –opinó Giorgionne

-Bueno, defendete de ese cargo –dijo Cholo.

Dow dio un paso de lado y casi en una mueca respondió:

-Cargos demasiado genéricos sin ninguna precisión, pero antes… Debo decirles que se han saltado un paso previo: Constituir un verdadero tribunal o conseguir un juez imparcial porque ustedes no pueden ser acusadores y jueces al mismo tiempo…

Asolador silencio bajo la bóveda cuando uno a uno les fue cayendo la ficha mental con la reflexión “Ah, se está refiriendo a nosotros!”

Manuel rompió el silencio.

-No se si se puede o no se puede. Nosotros vamos a hacerlo así.

Dow carraspeó.

-En cuanto a la acusación en sí, aunque esté mal hecha, todo lo que he hecho lo hice obedeciendo órdenes.

Cholo sonrió.

-Es una excelente aceptación de los hechos. Solo tendremos que discutir la condena.

El Gris quiso discutir pero ya Cholo le golpeaba las costillas con el caño para decirle que volviera a su puesto contra el murallón.

Comenzaba el verdadero juicio.

(Esta es una historia continuada. Sería aconsejable leerla desde el post n. 1)

jueves, noviembre 01, 2007

423 NADIE SEA MAS IGUAL QUE OTRO

Nilo encaró a Manuel de primera aun sin haberle visto nunca la cara. Le dijo que necesitaban asesoramiento para armar algún sistema de defensa para el caso de que los miembros de una comunidad -algunos de ellos- quieran o empiecen a desvirtuar la idea original de igualdad y propiedad limitada a la cantidad de cosas que se pueden usar personalmente, desde una bicicleta a una casa. Nunca una cadena de hoteles.

-Por supuesto -reafirmó Manuel. Nosotros no tenemos ningún secreto que revelar. Hasta ahora hemos corrido con suerte, pero si la gente cambia de idea…

Nilo le interrumpió:

-No podemos perder lo que ya se ha avanzado por el capricho de unos pocos!

-¿Y si no fueran pocos?

-…

-Mirá, está bien. Yo te entiendo, pero todo se ha hecho por la gente y si la gente quiere otra cosa…

Nilo se quedó pensando que aquello estaba bien dicho pero que de todas maneras había que agarrar un garrote y entrar a dar.

Porque claro! Conocía mucha gente que nunca había trabajado de nada y ahora con las comunas estaban obligados y otros que le estaban perdiendo el gusto a la vida desde que cualquier vecino de barrio tiene las mismas cosas que ellos. Eran unos cuantos que por ahora no hacían propuestas de retorno al antiguo sistema, porque estaban en la etapa de la murmuración y el desgano, pero que en cualquier momento…

Todos se interesaron en el tema porque varias veces habían comentado lo extraño que resultaba que nadie –aparentemente- estuviera embarrando la cancha por mezquindades. Vittorio comentó que justamente el punto que tocaba Nilo era uno de los más problemáticos. La sustitución de la antigua escala de valores y sistema de premios y castigos, por sus equivalentes de una sociedad sin clases que pretenda perpetuarse en el tiempo sin necesidad de ningún aparato represivo. Dijo:

-¿Cuáles serán los premios que la nueva organización social dará a sus miembros más provechosos para el enriquecimiento colectivo?

Para Magda esos premios ya se estarían dando sin necesidad de haberlos establecido en ningún tipo de legislación.

-Ha funcionado bien porque las comunas, en general son de tamaño reducido y todo el mundo dentro de ella sabe que hace cada cual en beneficio del conjunto. Existen premios morales, el reconocimiento dentro del núcleo de los conocidos…

Nilo torció la boca sin dejar de sonreír. Evidentemente ya había estado pensando en eso y tenía objeciones.

-Corremos el peligro de que se cree una casta de “meritócratas” que basándose en el capital de trabajos hechos, pretenda de alguna forma hacerlos valer para que su opinión se vuelva más pesada que la de sus vecinos. Sería una aristocracia de los méritos que podría funcionar bien pero que a la larga tiraría por la borda la idea de la igualdad y terminaría regenerando las eternas oligarquías y su gusto por la acumulación del poder.

El tema se ponía interesante. Margarita propuso que se fueran sentando en la rueda mientras ella traía el mate que había dejado pronto en la cocina.

Cuando estuvieron sentados retomó la palabra Vittorio.

-Se trata del viejo círculo vicioso del “no te metás que todo está cocinado por los de siempre”, que termina inevitablemente cumpliéndose en los hechos. Son siglos de reiterada experiencia negativa desde que se reinventó la democracia. La democracia representativa que nunca funcionó…

(Esta es una historia continuada. Sería aconsejable leerla desde el post n. 1)